Alrededor de 5 millones de personas en el mundo padecen algún tipo de lupus, una enfermedad autoinmune crónica que afecta principalmente a mujeres jóvenes, donde 9 de cada 10 casos corresponde a esta población, especialmente entre los 15 y 44 años. De todas sus variantes, el Lupus Eritematoso Sistémico (LES) es el tipo más frecuente y, a la vez, uno de los más desafiantes de diagnosticar debido a la diversidad de sus síntomas.



El LES es una enfermedad autoinmune, lo que significa que el sistema inmunológico en lugar de proteger el cuerpo ataca por error sus propios tejidos, es decir, aquello de lo que están hechos los órganos.Esto puede causar daños a largo plazo en diferentes partes del cuerpo, como las articulaciones y la piel, así como en órganos vitales como los riñones, el corazón, los pulmones, los vasos sanguíneos y el cerebro, llegando incluso a provocar complicaciones potencialmente mortales


“La enfermedad suele generar brotes frecuentes, y sabemos que cada brote duplica el riesgo de daño en los órganos, deteriorando la calidad de vida de quienes la padecen. Es importante que el paciente sea valorado por un médico especialista para que reciba la atención adecuada, cuidados preventivos y educación que le ayuden a mejorar su calidad de vida. La detección temprana en esta patología es de suma relevancia, pues se minimizan las complicaciones y se puede administrar el tratamiento adecuado según el caso”, destacó el Dr. Andrés Rojas, Director Médico de AstraZeneca para Centroamérica y Caribe

